Una palabra, múltiples sentidos
“Jutzpá” es una palabra que desafía toda traducción literal. Se la puede escuchar como audacia, descaro, insolencia o incluso como desvergüenza. Pero más allá de estas definiciones, la jutzpá encierra una esencia poderosa: es la actitud de avanzar, de desafiar lo que parece imposible, de no dejarse intimidar por lo que está frente a vos.
La dualidad de la jutzpá
¿Es buena o es mala? La respuesta depende del contexto. La mala jutzpá es la que nace de la arrogancia o la desconsideración. Pero la buena jutzpá es, en realidad, una virtud: es el fuego interno que nos impulsa a hacer lo correcto, incluso cuando todos dudan o critican. Es la chispa que te empuja a emprender, a tomar riesgos y a creer en vos mismo cuando nadie más lo hace.
Ejemplos históricos que inspiran
Desde la tradición judía, la jutzpá se ve como una fuerza esencial. Abraham la mostró cuando cuestionó los planes divinos para Sodoma y Gomorra. Moisés la demostró cuando defendió a su pueblo, aún sabiendo sus defectos. David se plantó ante Goliat sin miedo, con la jutzpá como estandarte.
El Baal Shem Tov, fundador del jasidismo, caminó sin temor ante cualquier amenaza, convencido de que el verdadero poder solo pertenece a D-os. El Rebe, Rabí Menajem M. Schneerson, enseñó que la jutzpá es esencial para pasar por encima de los desafíos que impone el mundo y también para exigir un cambio positivo y profundo.
Jutzpá en el mundo moderno
Guy Kawasaki, primer encargado de marketing de Apple, describió la jutzpá como “llamar al soporte técnico para informar de un error en un software pirateado”. Un ejemplo extremo, pero que muestra cómo la jutzpá puede ser la clave del éxito en cualquier industria: la fuerza de no aceptar lo que te imponen, de encontrar caminos nuevos y de innovar aunque todos digan que no se puede.
Jutzpá como filosofía de vida
En el mundo del emprendedurismo, la jutzpá es más que una palabra: es la energía que necesitás para enfrentar momentos duros, para levantarte cuando caés y para mantenerte fiel a tu propósito. Es ese impulso que te ayuda a aprender de los errores y seguir adelante, aún cuando la ansiedad y la frustración amenacen con detenerte.
La verdadera jutzpá no busca el ego ni la arrogancia. Busca el equilibrio entre la humildad y la firmeza. Es la valentía para seguir tu propio camino, aunque el resto del mundo te mire con desconfianza.
¿Vos también tenés jutzpá?
La historia está llena de personas con jutzpá: líderes, CEOS, emprendedores y artistas que se atrevieron a soñar y actuar con audacia. Hoy, tener jutzpá es un recordatorio de que lo imposible puede ser posible, si estás dispuesto a no dejarte intimidar por las voces de afuera.
🚀 ¿Te atreves a ir contra la corriente?
En Jutzpá Podcast, te traemos historias de aquellos que decidieron romper las reglas del juego, desafiar lo establecido y transformar lo imposible en realidad.
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